Ninguna sorpresa en el Ariake Arena de Koto-Ku (Tokio), donde ayer el héroe local Naoya Inoue demolió al desafortunado retador coreano Ye Joon Kim en solo cuatro asaltos. Kim fue un sustituto de última hora, entrando en lugar del retador oficial Sam Goodman, quien tuvo que renunciar a la oportunidad titular debido a una lesión sufrida durante el entrenamiento. Con este último éxito antes del límite, el «Monstruo» conservó los títulos mundiales del peso supergallo y llevó su extraordinario récord a 29 victorias en otros tantos combates, con nada menos que 26 nocauts.
No pasó mucho durante el primer asalto, una clásica ronda de estudio que Inoue se llevó gracias a algunos golpes al cuerpo en los últimos momentos del episodio. La pelea cobró vida en el segundo asalto, cuando el campeón mundial comenzó a desplegar todo su repertorio, conectando repetidamente a la cabeza y al cuerpo con una facilidad asombrosa.
Kim intentó reaccionar durante el tercer asalto, en el que logró conectar algunas buenas combinaciones y se atrevió a intercambiar golpes en el centro del ring con el astro japonés. Sin embargo, su coraje fue de corta duración. Inoue demostró tener una potencia y una confianza en sí mismo claramente superiores, y en el cuarto asalto cerró el combate a su manera.
El final estuvo marcado por una dosis de ironía, ya que justo antes de recibir la combinación decisiva, Ye Joon Kim invitó teatralmente a Inoue a acercarse, solo para acabar en la lona segundos después tras un demoledor uno-dos a la cabeza. Es probable que algunos golpes anteriores al cuerpo también influyeran en su decisión de no levantarse, ya que Kim sujetaba visiblemente su costado derecho mientras escuchaba impotente la cuenta del árbitro.
Ahora Naoya Inoue puede centrarse en sus próximos objetivos. Según reveló Bob Arum, el «Monstruo» volverá al ring en primavera en Las Vegas y luego peleará en Arabia Saudita más adelante en el año. Su próximo oponente, según algunos rumores, será el invicto mexicano Alan Picasso, pero muchos ya piensan que en el peso supergallo Inoue no tiene rivales y que solo un salto adicional de categoría por parte del japonés podría permitirnos verlo enfrentarse a oponentes capaces de inquietarlo.