Los muchos aficionados que pedían una revancha entre “Tank” Gervonta Davis y Lamont Roach han sido complacidos: los dos pesos ligeros estadounidenses se enfrentarán nuevamente el 16 de agosto. En juego estará el Título Mundial de la AMB, actualmente en manos de Davis, quien lo conservó gracias al veredicto de empate dictado por los jueces el pasado 1 de marzo. Mientras tanto, la figura de Jake Paul ya asoma en el horizonte…
La necesidad de una revancha se hizo evidente debido a las controversias que siguieron al primer combate entre Davis y Roach. Aunque “Tank” partía como claro favorito, la pelea fue sumamente equilibrada, con un Roach que logró una remontada progresiva en la segunda mitad del combate, al punto de que muchos observadores lo vieron ganar por un margen muy estrecho.
A aumentar la polémica contribuyó el árbitro Steve Willis, quien cometió un error evidente en el noveno asalto al no contar a Gervonta Davis cuando este, poco después de recibir un jab de izquierda en el ojo, se arrodilló y se dirigió sin permiso a su esquina para que le limpiaran el rostro con una toalla.
La revancha servirá entonces para aclarar si Davis subestimó el compromiso o si Roach realmente tiene las herramientas necesarias para ponerlo en apuros. Por un lado, es muy posible que “Tank” no se haya preparado al 100%, dado que casi todos pronosticaban una victoria fácil. Por otro lado, hay que reconocer que Roach perdió muchos puntos adoptando una estrategia demasiado conservadora hasta la mitad del combate, por lo que con un poco más de valentía podría incluso hacerlo mejor.
Aunque la gran mayoría de los aficionados al boxeo, en caso de victoria de Davis, clamarían por una unificación mundial contra el campeón del CMB, Shakur Stevenson, esa posibilidad no parece hoy la más probable.
Según algunos rumores, Davis ya estaba listo a principios de marzo para anunciar un extraño combate contra el exyoutuber Jake Paul, anuncio que se pospuso solo por el inesperado empate ante Roach y las polémicas que le siguieron. La idea de organizar el enfrentamiento entre el campeón y la estrella mediática sigue viva y podría concretarse en el mes de noviembre.
Las primeras informaciones apuntan a que se trataría de una exhibición, ya que sería extremadamente difícil conseguir la aprobación de una comisión atlética estadounidense para que fuera una pelea profesional oficial, dada la enorme diferencia de peso entre ambos.
Veremos si Davis decide realmente seguir ese camino. Si lo hace, sin duda se alzarán fuertes críticas por su tendencia a anteponer los intereses comerciales a la gloria deportiva. Una tendencia que hasta ahora lo ha llevado a construir un palmarés muy inferior al que muchos esperaban cuando irrumpió en la élite del boxeo mundial.