Anoche, en Bolonia, se disputaron dos títulos importantes durante la Bologna Boxing Night, celebrada en el PalaDozza. El evento fue organizado gracias a la colaboración entre Bolognina Boxe y Promo Boxe Italia. En la cartelera, Pamela Noutcho conquistó el título mundial IBO del peso ligero por decisión dividida (haz clic aquí para leer nuestro informe completo), mientras que Ghaith Weslati se proclamó campeón italiano del peso pluma tras vencer por KO técnico en el cuarto asalto a Nicolò “Il Toro” Setaro.
Weslati y Setaro, ambos de 25 años, se enfrentaron por el cinturón vacante. Setaro aceptó de inmediato el desafío al saber que sustituiría al lesionado Raffaele Imparato.
Suena la campana y comienza la fase de estudio. Setaro recibe un gancho de izquierda, mientras que Weslati cambia con frecuencia los niveles, lanzando rectos de derecha al cuerpo, muy concentrado y activo con el jab.
En el segundo asalto, Weslati adopta una actitud más agresiva. El ritmo aumenta: Setaro, bien cerrado, conecta precisos ganchos de derecha, mientras que el púgil afincado en Livorno se mantiene ordenado y trabaja con ambas manos.
En el tercer round es Setaro quien inicia al ataque, golpeando al cuerpo y llevando al rival contra las cuerdas, pero Weslati reacciona con calma y responde con bellas combinaciones de uppercut y gancho que ponen en aprietos a “Il Toro”. Weslati castiga con fuerza al cuerpo y, al final del asalto, Setaro cae y es contado; logra levantarse, claramente tocado, justo cuando suenan los tres minutos.
En el cuarto round, Weslati lanza una combinación que derriba de nuevo a Setaro con un gancho de izquierda. El árbitro detiene el combate: el boxeador lombardo estaba visiblemente en apuros.
Desde el primer instante, Weslati dejó claro que quería ganar a toda costa. El joven de origen tunecino es ahora, con pleno mérito, el nuevo campeón italiano del peso pluma.
Su entrenador, Lenny Bottai —recordado por sus emocionantes batallas sobre el ring—, se mostró muy feliz por su discípulo, que ahora luce con orgullo el cinturón tricolor y puede legítimamente aspirar a metas aún mayores.