El torneo de los pesos pesados del Boxing Grand Prix comienza con buen pie para Italia. Nuestro representante Davide Brito superó sin mayores apuros los dieciseisavos de final, imponiéndose con claridad por puntos al francés Clément Gillet. La superioridad del púgil italiano quedó reflejada en el triple 60-54 de los jueces, que le otorgaron de forma unánime todos los asaltos.
El toscano inició el combate con cautela, moviéndose con rapidez sobre las cuerdas y estudiando los movimientos del rival, más bajo de estatura, que intentaba acortar la distancia. Una vez descifrado el estilo de Gillet—cuyo mejor golpe era el directo de izquierda en avance—Brito empezó a soltar las manos y, a partir de ese momento, no hubo historia.
Los golpes del italiano se colaban con una facilidad desconcertante en la guardia del rival, abrumando a un Gillet demasiado rígido en sus desplazamientos como para evitar los contundentes golpes de contención que lo mantenían alejado de su objetivo.
Tras encajar una gran cantidad de impactos, el francés se la jugó en el tercer asalto, dando lugar a dos minutos de gran intensidad en los que logró algún éxito parcial. Sin embargo, ese esfuerzo lo dejó sin aire, y Brito lo aprovechó con inteligencia para cerrar el round de forma magnífica, anulando así la breve reacción de Gillet.
En el cuarto asalto, ambos boxeadores bajaron un poco el ritmo debido al desgaste del round anterior: los golpes perdieron potencia y los agarres fueron más frecuentes. Sin embargo, el trabajo más preciso y efectivo seguía siendo del italiano.
Al comenzar el quinto asalto, el sistema de puntuación abierta informó a los atletas de la ventaja ya inalcanzable de Brito, quien ganó aún más confianza. Disputó los dos últimos asaltos con total dominio del ring, llegando incluso a lucirse con algunas esquivas de gran factura en flexo-torsión para evitar los amplios ganchos de un Gillet ya desesperado.
Solo faltó la guinda del nocaut para Brito, quien en el último asalto logró hacer tambalear por un instante al rival con un gancho de derecha, pero no encontró la apertura para el golpe definitivo. Poco importa: la victoria por puntos fue clara e inapelable, justo lo que necesitaba para adquirir confianza de cara a los próximos compromisos del torneo.
En los octavos de final, Davide se enfrentará al pegador bosnio Ahmed Krnjic, quien hoy noqueó a su rival en el tercer asalto con una serie de violentos uppercuts de izquierda al cuerpo. Sin duda será un reto más peligroso para nuestro púgil, ya que Krnjic posee una gran pegada y una agresividad constante. No obstante, el zurdo bosnio parece algo lento y predecible en sus desplazamientos, y podría verse en apuros ante una estrategia basada en la movilidad y los cambios de dirección. Brito deberá evitar, por tanto, que el combate se desarrolle en la corta distancia durante largos tramos, y deberá imponer la mayor creatividad de su boxeo.