La noticia era ampliamente previsible, pero la confirmación definitiva solo llegó ayer. El astro ucraniano Oleksandr Usyk, quien hace poco más de un mes logró la hazaña histórica de unificar los cuatro principales títulos mundiales de peso pesado al derrotar al gigantesco boxeador inglés Tyson Fury, ha decidido renunciar al título IBF. Esta decisión era esencialmente obligada debido a la cláusula de revancha que obligará a Usyk a enfrentarse nuevamente a Fury en diciembre, impidiéndole cumplir con la obligación de defensa obligatoria de la IBF contra el retador inglés Daniel Dubois.
Usyk anunció su decisión en un video publicado en las redes sociales donde, dirigiéndose a Anthony Joshua y Daniel Dubois, quienes probablemente se enfrentarán en septiembre en Wembley, dijo: «Anthony y Daniel, escuchen – sé que el título IBF es importante para ustedes. Es mi regalo para ustedes para el 21 de septiembre».
Como aclaró el famoso periodista estadounidense Dan Rafael, Dubois fue rápidamente elevado al rango de campeón mundial tras la renuncia de Usyk. El inglés había ganado el título IBF interino con su abrumadora victoria sobre el croata Filip Hrgovic, quien había mantenido durante mucho tiempo el estatus de retador obligatorio, pero ahora se encuentra en el trono en pleno derecho. En caso de que se oficialice el cada vez más probable derbi de Wembley, Dubois subirá al ring con el cinturón IBF, mientras que Joshua asumiría el papel de retador.