Un espectáculo inolvidable tuvo lugar en el evento estelar de la velada organizada por Teiken Promotions de Akihiko Honda en el Kokugikan de Tokio. Los boxeadores japoneses Kenshiro Teraji y Seigo Yuri Akui, campeones mundiales del peso mosca del WBC y WBA respectivamente, libraron una guerra durante doce asaltos intensos en un sensacional combate de unificación. Teraji se impuso en el último asalto con un increíble sprint final, logrando el nocaut técnico mientras estaba en desventaja en dos de las tres tarjetas oficiales. La pelea fue tan emocionante que, sin duda, será una de las principales candidatas al premio de Fight Of The Year 2025.
Tras un primer asalto de estudio, en el que ambos boxeadores recurrieron principalmente al jab y mantuvieron la guardia alta para protegerse el rostro, fue Akui quien decidió acelerar el ritmo. En el segundo y tercer asalto, el campeón de la WBA aumentó significativamente la intensidad de sus ataques, combinando golpes con convicción y superando a su rival en la mayoría de los intercambios.
A partir del cuarto asalto, sin embargo, Teraji abandonó el estilo inusualmente prudente que había adoptado al inicio. Aceptó la guerra sin cuartel propuesta por su rival y respondió golpe a golpe a sus feroces ataques.
El resultado fueron cuatro asaltos de acción incesante, con un ritmo infernal y sin respiro. Cada combinación de un boxeador era inmediatamente respondida por el otro, lo que hizo que la tarea de los jueces para puntuar los asaltos después de cada campanazo fuera extremadamente difícil.
Tras un octavo asalto ligeramente menos intenso, Kenshiro Teraji cambió su táctica por segunda vez en la pelea. Comenzó a utilizar el ring en toda su amplitud y adoptó el rol de contragolpeador, «castigando» la agresividad de Akui con golpes secos e inesperados desde distintos ángulos.
En su intento por cerrar los espacios a su rival y absorber sus duras respuestas, Akui fue agotando sus últimas reservas de energía hasta llegar al duodécimo y último asalto completamente exhausto.
El bombardeo de Teraji se hizo cada vez más demoledor hasta que el árbitro Katsuhiko Nakamura intervino para detener la pelea, decretando el nocaut técnico. A primera vista, la detención podría haber parecido apresurada, pero al observar el rostro y la condición de Akui tras la detención, quedó claro que el árbitro había tomado la decisión correcta. El derrotado estaba completamente agotado y, poco después del final del combate, se desplomó en la lona sin poder mantenerse en pie debido al esfuerzo realizado y al castigo recibido.
Kenshiro Teraji logró así otra victoria espectacular en su emocionante carrera, consolidándose como uno de los mejores exponentes de la actualidad en las categorías de peso más ligero. Queda por ver si el japonés intentará continuar con la unificación de los títulos mundiales del peso mosca o si buscará un nuevo reto en una categoría superior. En cualquier caso, estamos seguros de que seguirá brindando espectáculo.