El Tartan Tornado está a punto de iniciar un nuevo capítulo en su carrera profesional. A los 34 años, Josh Taylor debutará en la categoría de peso wélter, y lo hará este sábado, en su Escocia natal, en el The SSE Hydro de Glasgow, frente al inglés nacido en Botsuana Ekow Essuman.
Según muchos observadores, Taylor debería haber subido de categoría hace ya varios años. Tras un ascenso espectacular que lo llevó a conquistar los cuatro cinturones mundiales del peso superligero, el escocés mostró un descenso notable en su rendimiento, que algunos atribuyen a los grandes sacrificios que le suponía mantenerse por debajo del límite de las 140 libras.
La marcha triunfal de Taylor hasta convertirse en campeón indiscutido fue especialmente impresionante también por el excelente historial de sus rivales, enfrentados en rápida sucesión. Basta pensar que, si se combinan los récords de los oponentes que enfrentó entre noviembre de 2018 y febrero de 2022, el resultado es de 133 victorias y ninguna derrota. En ese período, Taylor se midió de forma consecutiva con seis boxeadores invictos.
Sin embargo, el Taylor que se ha visto en los últimos años parece haber perdido algo de velocidad, resistencia y cualidades atléticas respecto al de sus mejores días. La derrota sufrida ante Teofimo López en 2023 dejó muchas dudas, sobre todo por la forma en que se produjo: el combate era muy igualado hasta el final del séptimo asalto, pero a partir de ahí Taylor bajó el ritmo de manera muy evidente.
Ahora el escocés tratará de beneficiarse del mayor margen físico que le ofrece la nueva categoría para cumplir con la báscula, y buscará acercarse a una nueva oportunidad mundialista en el límite de las 147 libras. El rival elegido para iniciar esta nueva etapa no es de los que deben tomarse a la ligera, pero tampoco parece representar una amenaza seria.
Essuman es un boxeador agresivo y con muy buenas cualidades físicas, pero carece de pegada, lo que le resta peligrosidad. Si Taylor llega en buenas condiciones al combate, no debería tener demasiados problemas para controlarlo en los primeros asaltos y desfondarlo con el paso de los rounds.