Este sábado, en el Honda Center de Anaheim, California, Gilberto «Zurdo» Ramírez defenderá sus títulos mundiales del peso crucero de la WBA y la WBO ante el cubano Yuniel Dorticós. El combate será parte del evento organizado por Most Valuable Promotions y Golden Boy Promotions. Ramírez unificó los cinturones el pasado noviembre en Riad, al imponerse claramente por puntos al británico Chris Billam-Smith. Dorticós, por su parte, intentará proclamarse campeón del mundo por tercera vez.
Gilberto Ramírez: el último paso antes de las súper peleas
Muchos opinan que a Zurdo solo le falta un paso más para conseguir la pelea que podría consagrarlo definitivamente o, al menos, llenar notablemente su cuenta bancaria. Nos referimos, por supuesto, a un súper combate contra el campeón mundial de la IBF, Jai Opetaia, que captaría la atención de los aficionados del boxeo en todo el mundo y permitiría definir sin dudas quién es el número uno del peso crucero.
Sin embargo, existe otro escenario, mucho menos atractivo para los expertos: Ramírez ha declarado públicamente que estaría dispuesto a enfrentar a Jake Paul si ambos ganan este sábado. Por tanto, si la WBA—que ya nos ha acostumbrado a decisiones sorprendentes—decidiera ubicar a Paul entre los primeros quince del ranking, podríamos ver al ex YouTuber disputando un título mundial. Ramírez, por supuesto, estaría encantado con la bolsa que eso le generaría.
Yuniel Dorticós: ¿qué queda de su sangre caliente?
En 2019, mantuve una amena conversación en La Habana con el reconocido entrenador cubano Carlos Miranda, quien se sorprendió al saber que Dorticós, como profesional, había adoptado un estilo muy agresivo, buscando el combate cuerpo a cuerpo y el nocaut. Miranda lo recordaba como un boxeador técnico y paciente en sus días como amateur.
En el boxeo rentado, sin embargo, el oriundo de Cienfuegos se dejó llevar muchas veces por su sangre caliente y protagonizó verdaderas guerras, incluso en peleas que podría haber ganado con mayor prudencia. La pregunta ahora es si Dorticós—con 39 años cumplidos y sin enfrentar a rivales de élite desde 2020—ha logrado conservar algo de aquella agresividad y osadía que mostraba en sus mejores momentos.
¿Qué pasará? ¡La predicción de Boxe Punch!
Se dice que la pegada es lo último que pierde un boxeador, pero seamos sinceros: esa frase es solo un cliché. No todos los púgiles generan su poder de la misma forma, y es evidente que aquellos que se apoyan en la explosividad y la velocidad de ejecución sufren una merma considerable con el paso del tiempo.
Dorticós era precisamente ese tipo de boxeador: sus golpes, secos y precisos, hacían daño sobre todo por su rapidez. Aunque sus tres últimas victorias llegaron por la vía rápida, eso no basta para convencernos de que esté en buena forma, ya que sus oponentes recientes no eran conocidos por su gran resistencia.
En su última pelea, en junio de 2024, el “KO Doctor” mostró una musculatura menos definida que en sus mejores años. Y aunque el combate duró solo un minuto, su velocidad de ejecución pareció bastante reducida.
Creo que la mejor versión de Dorticós habría representado un obstáculo muy difícil para Gilberto Ramírez. El mexicano pelea como un verdadero destructor en el peso crucero, lanzando un alto volumen de golpes al cuerpo y a la cabeza para desgastar a sus rivales, pero en el proceso también queda expuesto a recibir golpes y depende mucho de su resistencia.
Un rival explosivo y preciso, capaz de castigar en las trayectorias cortas, podría hacerle pagar caro cada intento de aproximación, complicando su estrategia. Sin embargo, la edad y la poca actividad de Dorticós en los últimos años hacen poco probable que logre contener al campeón.
Después de unos primeros asaltos parejos, espero que Ramírez aumente el ritmo, desgaste al cubano con su presión y su trabajo al cuerpo, y termine imponiéndose. Creo que su dominio irá creciendo y podría traducirse en una paliza que no llegue al límite.
Pronóstico: victoria por KO de Gilberto «Zurdo» Ramírez en los últimos asaltos.