Para el medallista de plata de los Juegos Olímpicos de Tokio, se acerca el momento de la verdad: este viernes, Keyshawn Davis tendrá la oportunidad de luchar por el título mundial del peso ligero contra el campeón de la WBO en la categoría, el ucraniano Denys Berinchyk. El evento, organizado por Top Rank de Bob Arum, tendrá lugar en el Madison Square Garden Theater de Nueva York y, además de Denys Berinchyk vs Keyshawn Davis, ofrecerá al público una cartelera secundaria de lujo, destacando el regreso del peso pesado Jared Anderson y la presencia de talentosos prospectos como Xander Zayas, Rohan Polanco y Abdullah Mason.
Denys Berinchyk: juego de pies, ritmo de trabajo y defensa
Cuando un boxeador no ha sido dotado por la naturaleza con una pegada realmente contundente, debe compensar esta carencia con otras cualidades para alcanzar la élite del boxeo. Berinchyk es un ejemplo perfecto de este tipo de atleta: sus golpes no son particularmente explosivos ni letales, pero el ucraniano ha logrado mantenerse invicto en 19 combates profesionales y ceñirse un cinturón mundial. Lo ha conseguido gracias, sobre todo, a tres atributos: juego de pies, ritmo de trabajo y defensa.
Sobre el ring, Berinchyk se mueve sin descanso, atacando desde ángulos poco convencionales, cambiando de guardia de forma repentina y desorientando a sus oponentes con movimientos veloces. Su ritmo, a pesar de estar cerca de cumplir 37 años, sigue siendo frenético, tanto que en su pelea contra Navarrete, donde conquistó el título, lanzó la impresionante cifra de 732 golpes en total. Finalmente, su habilidad para bloquear o desviar los golpes con los brazos y los guantes está claramente por encima del promedio y lo convierte en un boxeador difícil de encajar.
Keyshawn Davis: de las dudas al entusiasmo en poco más de un año
Después del combate de Keyshawn Davis contra su compatriota Nahir Albright en octubre de 2023, muchos levantaron una ceja. A pesar de haber ganado merecidamente gracias a una iniciativa claramente superior a la de su rival, el prospecto de Norfolk tuvo dificultades para encontrar la distancia, falló demasiados golpes y, en los asaltos finales, recibió algunos impactos de más. Para colmo, esa noche se volvió aún más frustrante cuando dio positivo por marihuana, lo que, debido a las regulaciones en Texas, le costó la victoria en los registros oficiales, transformando el resultado en un «No Contest».
Sin embargo, el joven logró recuperarse en tiempo récord y, en poco más de un año, su moral y sus acciones se dispararon gracias a tres victorias consecutivas de gran nivel. En particular, su último triunfo fue impresionante: enfrentándose al feroz pegador argentino Gustavo Lemos, quien siete meses antes había hecho sufrir a Richardson Hitchins en el peso superligero, Davis deslumbró al público con un contundente KO en solo dos asaltos. Una gran carta de presentación de cara a su pelea por el título mundial.
Denys Berinchyk vs Keyshawn Davis: ¿qué sucederá? ¡La previsión de Boxe Punch!
Sin restarle mérito a los incuestionables logros de Davis, hay que admitir que sus últimos tres oponentes tenían un estilo perfecto para resaltar sus mejores cualidades. Tanto el ya desgastado José Pedraza como los poco sofisticados Miguel Madueno y Gustavo Lemos resultaron ser blancos estáticos, fáciles de bombardear a placer.
Contra Berinchyk, en cambio, es extremadamente probable que el estadounidense tenga que esforzarse mucho más para conectar sus explosivos golpes, ya que el ucraniano no se queda quieto frente a su rival dándole tiempo para cargar su derecha, ni ataca de frente exponiéndose de manera suicida.
El campeón mundial intentará, como de costumbre, recorrer kilómetros moviéndose en círculo, cambiando constantemente de dirección y alternando desplazamientos puramente defensivos con repentinas ofensivas. Por primera vez desde su pelea contra Albright, el timing de Davis será puesto realmente a prueba.
El estadounidense deberá encontrar la manera de infligir daño a su experimentado adversario y, al mismo tiempo, tendrá que mantener la calma y no desesperarse si durante varios asaltos sus combinaciones son neutralizadas por la defensa y los impredecibles movimientos de Berinchyk.
Sin embargo, si bien el ucraniano parece tener las herramientas para amortiguar los ataques de su joven retador y minimizar el daño, cambiar el rumbo del combate y producir resultados ofensivos lo suficientemente concretos y efectivos como para llevarse un número significativo de asaltos en las tarjetas podría ser un desafío mucho más complicado para él.
Contra Navarrete, Berinchyk se vio favorecido por el hecho de que el mexicano es un pésimo contragolpeador: cuando es atacado, tiende a absorber el impacto antes de lanzar su ofensiva en un segundo momento. Golpear en retroceso no es precisamente una de sus habilidades. Davis, en cambio, posee armas disuasivas mucho más afiladas que este viernes harán que para el campeón resulte arriesgado y agotador desplegar sus características ráfagas de golpes.
En lo personal, creo que el retador estadounidense tendrá que sudar la gota gorda: espero un combate complicado en el que la experiencia, el oficio y la inteligencia táctica de Berinchyk podrían resultarle incómodas a Davis en varias fases de la pelea, haciéndolo lucir menos brillante de lo habitual. No obstante, el estadounidense debería lograr imponer, con el paso de los asaltos, su mayor explosividad, su repertorio ofensivo más amplio y su frescura atlética, sacando ventaja en las puntuaciones.
Por lo tanto, mi predicción es una victoria por decisión unánime para Keyshawn Davis al término de un combate que debería proporcionarle una valiosa experiencia de cara al futuro de su prometedora carrera.