Ayer llegó la oficialización del próximo compromiso de Guido Vianello, peso pesado de referencia de nuestro boxeo, que el 11 de octubre subirá al ring del Wells Fargo Center de Filadelfia para medirse con el invicto canadiense Alexis Barriere. Un combate crucial para la carrera del italiano, que busca retomar el camino tras la derrota sufrida en abril a manos del estadounidense Richard Torrez. Para lograrlo, sin embargo, deberá superar varios obstáculos.
El primero, inmediatamente evidente para quien haya visto el cartel de la velada, es que el evento será organizado por Matchroom Boxing de Eddie Hearn, promotor de Alexis Barriere. Vianello será por tanto el “lado B” o, si se prefiere, el boxeador visitante, una condición que, como bien sabemos, puede influir en la actuación del árbitro, los jueces e incluso a veces del médico de turno.
En segundo lugar, las características técnicas y estilísticas de Barriere hacen que el desafío no sea nada sencillo desde el punto de vista táctico. Vianello ha ofrecido sus mejores actuaciones frente a rivales muy fuertes físicamente pero estáticos y rígidos de tronco, como Efe Ajagba y Arslanbek Makhmudov, a quienes logró descolocar con sus desplazamientos laterales y entradas sorpresivas. Su próximo rival, sin embargo, pertenece a otro perfil.
Barriere no es un peso pesado especialmente grande según los estándares actuales de la categoría. Hasta hace dos años rondaba los 100 kilos antes de ganar algo de masa extra; en su última pelea marcó unos 107. Se trata de un zurdo paciente que se apoya sobre todo en la velocidad de ejecución y en el sentido del tiempo, compartiendo así con Vianello el mismo terreno táctico preferido.
Por su parte, nuestro representante podrá confiar en su ventaja de experiencia a alto nivel. Barriere ha disputado hasta ahora 12 combates profesionales, ganándolos todos y logrando 10 nocauts, pero el nivel de sus oponentes ha sido extremadamente bajo, lo que dificulta evaluar plenamente sus virtudes y eventuales carencias a partir de los vídeos disponibles.
La disparidad entre el canadiense y sus rivales ha sido hasta hoy demasiado grande como para ponerlo realmente a prueba, pero también para hacerlo crecer: un aspecto que puede alimentar el optimismo de Vianello, que en cambio ya ha tomado parte en varios combates competitivos que lo han forjado técnica y mentalmente.
El combate formará parte del respaldo de la velada encabezada por el debut en la categoría superwélter del cotizado estadounidense Jaron Ennis, ya campeón mundial IBF y WBA del peso wélter. El evento será transmitido en directo por DAZN.