Este sábado, en el Tottenham Hotspur Stadium del Reino Unido, se celebrará el esperado combate entre Chris Eubank Jr y Conor Benn. El derbi entre los hijos de dos leyendas que encendieron los cuadriláteros británicos a finales de los años 80 y principios de los 90 se disputará ante un público masivo y generará una recaudación muy significativa, ya que ambos protagonistas recibirán una bolsa de aproximadamente 7,5 millones de libras cada uno. El evento será transmitido en Italia por DAZN en PPV a un precio de 24,99 euros, con inicio de la cobertura a las 18:00.
Chris Eubank Jr: un boxeador “instintivo” que nunca quiso tomárselo en serio
Chris Eubank Jr siempre ha sido un boxeador instintivo en el ring. En lugar de seguir un guion preestablecido o confiar en acciones convencionales practicadas en el gimnasio, el británico prefiere improvisar, confiando en sus dotes atléticas excepcionales. Por eso, muchos de sus movimientos resultan poco ortodoxos y no agradan a los puristas del boxeo.
Sin embargo, en la primera parte de su carrera, el estilo de Eubank fue bastante efectivo, especialmente contra rivales que se quedaban plantados frente a él, haciéndolo parecer una auténtica máquina de lanzar golpes. Pero cuando tuvo enfrente a boxeadores móviles y escurridizos como Billy Joe Saunders y George Groves, sus limitaciones salieron a la luz. Su juego de piernas, en particular, se reveló muy deficiente, haciéndolo ver torpe y poco coordinado al intentar acortar la distancia con un rival en movimiento.
Lamentablemente, la carrera de Eubank se estancó tras su paso de supermedio a medio: en los últimos cinco años se ha mantenido alejado de los grandes escenarios, conformándose con combates de segundo nivel y desperdiciando las oportunidades de una categoría que, hoy más que nunca (con muy pocas excepciones), parece falta de talento.
Conor Benn: un predestinado gracias a su apellido
Que Conor Benn estaba destinado de alguna forma a disputar el combate de este sábado era algo que muchos sospechaban desde su debut profesional. La oportunidad de volver a unir los apellidos Eubank y Benn en un mismo cartel después de más de dos décadas era demasiado atractiva como para que los promotores británicos la dejaran escapar, y todo lo que Conor tenía que hacer para ganarse la bolsa de su vida era evitar tropiezos y generar expectación en torno a su figura.
En esta tarea recibió más de una ayuda, empezando por la de su astuto promotor Eddie Hearn, que le eligió con mucho cuidado los rivales, sobre todo después de que el modesto francés Cedrick Peynaud lo derribara dos veces en el primer asalto en 2017, dejando al descubierto sus carencias defensivas y obligándolo a remontar con dificultad. Incluso cuando llegó el momento de dar el salto de calidad, a Benn le pusieron enfrente a boxeadores muy lejos de sus mejores días.
Sin embargo, en 2022, Benn dio positivo por clomifeno, una sustancia prohibida, en dos controles voluntarios realizados por la VADA. Esto provocó su suspensión provisional por parte de la UK Anti-Doping (UKAD) y del British Boxing Board of Control (BBBofC), revocada después por el tribunal independiente National Anti-Doping Panel (NADP) en noviembre de 2024.
¿Qué pasará? ¡La predicción de Boxe Punch!
Como explicamos hace un tiempo (haz clic aquí para leer el artículo), el nivel de este combate, pese al entusiasmo que está generando en el público, se presenta bastante mediocre si lo comparamos con la élite mundial del boxeo. Para analizar las posibles dinámicas del combate, tenemos que insistir en algunos puntos clave.
Si Eubank Jr sube al ring en óptimas condiciones físicas y con toda su potencia, no debería tener mayores problemas para imponerse. Chris se sentirá muy cómodo ante un rival que lo ataca sin descanso y podrá imponer sus cualidades en la corta distancia para castigar duramente la agresividad descontrolada del oponente y los huecos defensivos que suele dejar.
Esto parece aún más probable teniendo en cuenta las últimas actuaciones de Conor Benn, quien tras su suspensión en 2022—que le impidió pelear en suelo británico—ha disputado dos combates en Estados Unidos sin dejar una gran impresión. En ambas ocasiones, su pegada pareció disminuida con respecto al pasado, y más allá de si esto se debe al cambio de categoría (de wélter a superwélter) o a la interrupción del uso de sustancias dopantes, es un problema importante.
En el ring se enfrentarán un ex supermedio, que lleva cinco años en el peso medio para imponer su físico, y un ex wélter, que subió de categoría para acercarse al combate (y a la bolsa) de su vida. La diferencia física entre ambos se perfila como muy notable, y el choque de estilos—destinado a convertir el combate en una auténtica guerra—hará aún más relevante ese aspecto.
¿Cuál es entonces la incógnita que podría cambiarlo todo? Se llama «cláusula de rehidratación»: según el contrato, Chris Eubank Jr no podrá aumentar su peso más de diez libras entre el pesaje y la mañana de la pelea si no quiere perder una parte importante de su bolsa, y esta limitación podría debilitarlo y hacer que rinda menos en el ring.
Si eso ocurre, contener la presión incansable de un boxeador como Benn—capaz de mantener un ritmo altísimo durante toda la pelea—podría volverse mucho más difícil de lo previsto, abriendo la puerta a cualquier resultado posible.
Deseando ver un combate entre dos atletas en su mejor versión, me arriesgo con mi habitual pronóstico partiendo de la base de que el favorito subirá al cuadrilátero con la energía suficiente para mostrar sus mejores cartas. Por lo tanto, pronostico una victoria de Chris Eubank Jr por KO en el último tercio del combate.