Joe Calzaghe fue un boxeador extraordinario y el domingo 21 de septiembre recibió un merecido reconocimiento tras una carrera invicta (46-0-0, 32 KO), al ser incorporado al British Boxing Hall of Fame. Durante la ceremonia, Calzaghe fue elegido por un jurado de historiadores y escritores como el mejor boxeador en la historia del boxeo británico.
La encuesta, promovida por Dave Harris, fundador del Salón y de la Ringside Charitable Trust, vio triunfar al Italian Dragon, quizás de forma sorprendente, por encima de nombres como Lennox Lewis, Nigel Benn, Chris Eubank, Ken Buchanan y Naseem Hamed, entre otros.
En el evento, celebrado en un abarrotado Ballatyne Hotel de Hastings, un emocionado Joe recogió el premio acompañado por su hijo, Joe Calzaghe Jr. Al mismo tiempo recibió un galardón póstumo para su padre, el entrenador Enzo Calzaghe, por su enorme contribución al desarrollo del boxeo británico.
Frente a los micrófonos, un conmovido Calzaghe agradeció a su familia, especialmente a su padre, y dedicó palabras de gran aprecio a Chris Eubank, a quien reconoció como el rival más duro que enfrentó. Un juicio que, indirectamente, resta importancia a los dos combates más emblemáticos de su carrera, ante los legendarios Roy Jones Jr. y Bernard Hopkins.
La carrera de Joe fue brillante, aunque quizás le faltaron algunos nombres de mayor peso, más allá de un ya desgastado Jones Jr. y Hopkins. Entre sus victorias más destacadas figuran las obtenidas ante Eubank, Jeff Lacy (considerado favorito antes del combate) y Mikkel Kessler. Fundamental fue el papel de su padre, que lo animó a aceptar la pelea con Lacy a pesar de las dudas del joven Joe, al intuir su verdadero potencial. Como reconoció el propio Calzaghe:
“Nunca habría aceptado esa pelea si no hubiera sido por mi padre.”
Con una carrera inmaculada y un talento enorme—físico, psicológico y técnico—el veredicto sin duda generará debate, sobre todo si se compara con el historial más amplio (aunque con dos derrotas) del gran Lennox Lewis.
Más allá del resultado de la encuesta, que podría discutirse durante horas, la ocasión sirvió para rendir un merecido homenaje a la carrera de un boxeador no siempre lo suficientemente valorado. Además de por su sobriedad y seriedad sobre el ring, Joe Calzaghe merece ser recordado por su extraordinaria fortaleza mental y su abrumador poder físico, una combinación de dureza, confianza, ritmo implacable y resistencia que ningún rival pudo soportar.
Junto a la premiación de Calzaghe, muchas otras personalidades del mundo del boxeo también recibieron prestigiosos reconocimientos, en una velada destinada a rendir tributo a quienes han sabido dejar huella, tanto dentro como fuera del cuadrilátero.